Aritxe y yo

Aritxe y yo

martes, 23 de agosto de 2011

  

Einstein, afirmó: "Es preciso hacer cualquier cosa para que el trágico caso de Sacco y Vanzetti se mantenga siempre vivo en la conciencia de la humanidad. Los dos anarquistas italianos demuestran que, en última instancia, las instituciones democráticas más minuciosamente estudiadas no son mejores que los individuos que las usan como instrumento".






jueves, 18 de agosto de 2011

Sanidad gratis para los peregrinos... tranporte,alojamiento,comida.................

No hay crisis en la sanidad madrileña si de lo que se trata es de atender a los peregrinos de la Jornada Mundial de la Juventud. A diferencia de lo ocurre con los pacientes de otras comunidades autónomas y de otros países, cuya asistencia debe facturarse a sus lugares de origen, basta con presentar una credencial de peregrino para que la sanidad pública madrileña corra con todos los gastos, engrosando así la financiación pública de este evento confesional, según se desprende de un correo electrónico enviado por indicación de la Dirección General de Atención Primaria a todos los centros de salud.


 

La Consejería de Sanidad, la misma que hace pocos meses planeaba en un documento establecer copagos o suprimir una veintena de prestaciones sanitarias, ha difundido una orden entre los centros de salud para que la asistencia sanitaria a los peregrinos de fuera de Madrid esté exenta de facturación a terceros.
Con presentar una credencial de peregrino, la sanidad pública corre con los gastos La orden se ha llevado a cabo mediante un correo remitido en la tarde de ayer por indicación del director general de Atención Primaria, Antonio Alemany, a las siete direcciones de área de este nivel asistencial, del que dependen los centros de salud, de toda la Comunidad de Madrid.
El correo, al que ha tenido acceso la Coordinadora Antiprivatización de la Sanidad Pública de Madrid, deja claro, "ante las dudas" surgidas sobre la asistencia a los peregrinos entre los profesionales de los centros de salud, que "no se debe realizar facturación por la asistencia prestada en nuestros centros de salud" a los fieles asistentes a la JMJ.
Sin embargo, fuentes de la Consejería de Sanidad aseguraron a este diario que a los peregrinos "se les va a cobrar como a todo el mundo" y aseguraron que esta tarde se remitirá un nuevo correo electrónico "aclaratorio". Según afirman, el objetivo del correo remitido ayer por la Dirección General de Atención Primaria "por si había había algún equívoco" sólo trataba de que "no se cobrara en metálico" a los peregrinos atendidos.
Desde la coordinadora se preguntan si los fieles de otras confesiones no residentes en Madrid también deberán quedar exentos de facturación a partir de ahora y aseguran que muchos profesionales sanitarios de los centros de salud están "indignados" con este trato de favor, máxime cuando se está hablando de que faltan recursos en sanidad.
Según un portavoz de la Coordinadora, los profesionales tampoco saben cuál debe ser el documento que deben exigir para acreditar la condición de peregrino de un paciente y excluir del pago, así a su país o comunidad autónoma de origen.

Claro esta   que los  comas  etilikos,    serán  por   cuenta  suya  ... o  también los pagamos  nosotros ¿?



Vicenç Navarro
Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas de la Universitat Pompeu Fabra

El máximo dirigente de la Iglesia católica, Benedicto XVI, ha denunciado en repetidas ocasiones lo que él ha definido como “el laicismo militante” que supuestamente existe en España, semejante –según él– al ocurrido durante los años treinta en este país. De estas y otras declaraciones se deduce que percibe esta militancia laica como una amenaza para la Iglesia (traducida en un anticlericalismo) y también para la sociedad, pues representa una intolerancia hacia la religión católica impropia en una sociedad democrática, donde todas las religiones deberían respetarse, con especial consideración a la católica –tal y como reconoce la Constitución de 1978–, que es a la que supuestamente pertenece la mayoría de la población española.
Esta crítica al laicismo es sorprendente pues muestra un escaso conocimiento de la historia de España. Una lectura objetiva de nuestro pasado muestra que ha sido la Iglesia católica la que históricamente ha mostrado una enorme hostilidad hacia el laicismo, habiendo además violado los derechos democráticos, no sólo de la población laica, sino de la mayoría de la población española a lo largo de nuestra historia. La mayor expresión de tal hostilidad se dio durante los años treinta a los que Benedicto XVI hace referencia, a los cuales podría añadirse la experiencia antilaica de la Iglesia durante los años cuarenta, cincuenta, sesenta y setenta, que el papa silencia e ignora.
Es importante recalcar que la Iglesia católica apoyó un golpe militar que terminó con un proceso democrático (y que asesinó al mayor número de españoles en su historia), lo cual fue objeto de la ira de las clases populares que, viendo a la Iglesia como parte militante del golpe, agredió al clero y a las instituciones de la Iglesia sin que tales actos contaran con el apoyo del Gobierno republicano democráticamente elegido. La brutal represión que el golpe instauró, sí que contó, sin
embargo, con el apoyo del Estado dictatorial del cual la Iglesia formó parte. Su objetivo fue imponer su ideología. Basta leer el Catecismo patriótico español publicado en 1939 y en 1951, en el que se afirmaba que los enemigos de España eran “el socialismo, el comunismo, el sindicalismo, el liberalismo y el laicismo”. Benedicto XVI debería conocer y reconocer que tal creencia significó la eliminación de las personas pertenecientes a aquellas sensibilidades, lo que provocó no sólo su expulsión, encarcelamiento, tortura y exilio, sino también su fusilamiento, todo ello a fin de “no tolerar a los envenenadores del alma popular” (Decreto de depuración de los funcionarios del Estado de 1939). En la mayoría de los tribunales en los que se decidía la eliminación de laicos, socialistas, comunistas, judíos y masones, estaba la Iglesia como parte y testigo. En realidad, en muchos de estos tribunales el informe de denuncia era escrito por los párrocos. Tal hostilidad de la Iglesia fue incluso más acentuada hacia los educadores de la enseñanza laica. Hubo casos como el de un sacerdote aragonés que llegó a informar de que el maestro de su pueblo era “fusilable” (citado en el libro La Dictadura de Franco, de Borja de Riquer, del cual extraigo los datos de la represión durante la dictadura). La depuración de los maestros de la escuela pública laica fue masiva, acusándoles de querer inculcar valores laicos que contaminaban el alma popular. El objetivo de tal represión fue la “recristianización de la sociedad”, tal como indicó el ultraderechista Ibáñez Martín, ministro de Educación durante el periodo 1939-1951.
Esta represión alcanzó a todos los estamentos de la enseñanza pública, incluyendo las universidades, y todos los niveles dentro de ellas. De los 580 catedráticos universitarios existentes en España, 20 fueron ejecutados, 150 fueron expulsados y 195 se exiliaron. En algunas universidades, como en la Universidad de Barcelona, el 44% de su profesorado fue sancionando. La Iglesia supervisó y/o participó en cada una de estas denuncias. Como afirmó una autoridad educativa citada por De Riquer, era preferible que “una universidad estuviera integrada por ignorantes pero buenos, que por doctos pero malos”. Ser malo era tener, entre otros valores, el del laicismo.
Otra área en la que se plasmó la militancia antilaica de la Iglesia fue en el periodismo. La autorización para poder ser periodista pasó a ser muy restrictiva, según criterios definidos por la Iglesia, la Falange (el partido fascista) y el Ejército. De los 4.000 periodistas que solicitaron realizar su profesión entre 1939-1940, sólo lo obtuvieron unos 1.800. A todos los demás se les denegó el permiso de trabajar como periodistas al no ajustarse al criterio del tribunal político-religioso que evaluaba su “competencia”.
Benedicto XVI debería conocer y reconocer estos hechos ampliamente documentados en España, aún cuando han sido ocultados en la mayoría de medios de mayor difusión, y muy en particular en los influenciados por las derechas españolas. Estas, como la Iglesia, nunca han condenado sin paliativos aquella dictadura y los horrores que se hicieron en teoría en nombre de Dios, en la práctica, en la defensa descarnada de sus intereses materiales. Su enorme oposición a las fuerzas democráticas se debe a que estas desean una pérdida de los excesivos derechos que el régimen democrático –resultado de una Transición inmodélica– le otorgó, incluyendo su reconocimiento preferencial que le concede la Constitución, que contradice la aconfesionalidad del Estado, y que ha dado pie a toda una serie de privilegios heredados del régimen dictatorial anterior y que deben eliminarse. La visita de Benedicto XVI no es un paso adelante en esta vía correctiva, pues ni conoce ni reconoce el enorme sufrimiento que la Iglesia impuso a la población española, ni pedirá perdón al pueblo español por ello, ni cederá ni un ápice en el goce de sus privilegios. Así es la Iglesia católica.

martes, 16 de agosto de 2011

La ONU propone una unica moneda y al FMI como Banco Central Global



Llega la hora de la verdad. La ONU acaba de hacer público lo que se venía negociando a escondidas en los pasillos del poder. El organismo propone reformar el sistema monetario internacional, un nuevo Bretton Woods para sustituir a la hegemonía del dólar.

Desde el estallido de la crisis crediticia a mediados de 2007 la tensión en torno al papel que juega el dólar en la arquitectura monetaria ha sido cuestionada por algunas de las principales potencias del mundo, sobre todo, China y Rusia.
Este trascendental debate para la economía mundial se estaba negociando en privado por parte de los gobiernos y principales bancos centrales. Se trata de la reforma del actual sistema monetario internacional, vigente desde la supresión de los acuerdos de Bretton Woods por parte del Gobierno de EEUU a principios de los años 70. Desde entonces, el dólar se ha mantenido como la moneda de reserva por excelencia, sin ningún tipo de soporte real tras romper sus últimos lazos con el patrón oro.
La ONU propone ahora reformar el sistema monetario vigente, cuya hegemonía ostenta el dólar. Así, en un informe presentado durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), el organismo multilateral por excelencia reconoce que el sistema monetario no funciona correctamente y, de hecho, ha sido el gran “responsable” de la actual crisis financiera.
Por ello, la ONU afirma que el papel del dólar como moneda de reserva mundial debe ser reconsiderado, tal y como vienen exigiendo Rusia, China y las principales economías emergentes del planeta. De este modo, la institución aboga por la creación de un nuevo Bretton Woods, que deberá ser negociado entre los principales gobiernos, para establecer un nuevo sistema monetario que sustituya al actual.
“Sustituir el dólar por una moneda artificial podría resolver algunos de los problemas relacionados con los grandes déficit por cuenta corriente [esto es, falta de ahorro] que presentan algunos países y ayudaría a la estabilidad”, según señala Detlef Kotte, uno de los autores del informe. Sin embargo, “también se precisa un nuevo sistema de tipo de cambios. Los países deben mantener unos tipos de cambio [monetario] reales [ajustados a la inflación] estables”.

El papel del FMI

Por ello, según Kotte, debe mantenerse la intervención monetaria que aplican los bancos centrales, aunque también deja la puerta abierta a que sea una institución multilateral la encargada de mantener la estabilidad de los tipos de cambio, en referencia al Fondo Monetario Internacional (FMI). De este modo, el organismo no sólo aboga por sustituir a dólar como moneda de reserva mundial, sino por crear una especia de banco central a nivel mundial que, en este caso, sería el FMI.
En la nota de prensa remitida el lunes, la UNCTAD (perteneciente a la ONU) señala que una regulación y supervisión más efectiva del mercado financiero es “indispensable” para “prevenir la repetición de una crisis financiera y económica mundial como la actual”.
Sin embargo, no sólo es necesario revisar la supervisión financiera internacional, sino que “igualmente es importante una reforma del sistema monetario para reducir el margen de beneficios en la especulación monetaria y evitar, así, los desequilibrios comerciales de gran tamaño”. Con esta declaración, el organismo se refiere al exceso de ahorro por parte de las economías asiáticas (sobre todo, China) en los últimos años y el abultado endeudamiento (necesidad de financiación exterior) de otras potencias, como es el caso de EEUU. Es decir, a los desequilibrios comerciales a nivel mundial (abultados déficits por cuenta corriente) que ha propiciado el actual sistema monetario, según sostienen algunos destacados economistas.

Los derechos especiales de giro

El actual sistema “depende de la política monetaria que aplica el banco central que emite la moneda de reserva mundial” por excelencia (el dólar), en referencia a la Reserva Federal de EEUU, (FED). Unas decisiones que, según el informe, se toman de acuerdo a las necesidades políticas y económicas de EEUU, en clave nacional, “sin tener en cuenta las necesidades del sistema de pagos internacional y de la economía mundial” en su conjunto.
Sin embargo, según el estudio, ni un correcto manejo de los flujos de capital entre países ni la imposición de una nueva moneda de reserva mundial (en sustitución del dólar) va a resolver los problemas que afectan a las economías emergentes: “el problema del tipo de cambio”, añade el estudio. Y es que, “no es posible que un país pueda absorber los shocks externos de manera eficiente mediante la adopción, ya sea totalmente flexible o rígida, de los tipos de cambio”, según los economistas de la UNCTAD.
Por ello, el organismo sugiere que se debería establecer un sistema de tipos de cambio en base a un “patrón estable”, que sería gestionado y determinado de forma multilateral.
La UNCTAD sostiene que un nuevo sistema monetario basado en principios y normas multilateralmente convenidos es necesario para la estabilidad de la economía mundial y unas “condiciones equitativas para el comercio internacional”. En esencia, el organismo apunta a la necesidad de sustituir el dólar por un nuevo patrón monetario, basado en una cesta de divisas que gestionaría el FMI (los denominados derechos especiales de giro).
De este modo, “se reduciría la necesidad de mantener reservas internacionales” para defender los tipos de cambio (el valor de una moneda nacional), y “podría combinarse con un papel más fuerte de los derechos especiales de giro [cesta de divisas] si las asignaciones se hacen en función de las necesidades de liquidez que presenta un determinado país”, con el fin de “estabilizar su tasa de cambio real a un nivel acordado multilateralmente”.

La posición de China y Rusia

El gobernador del Banco Popular de China, Zhou Xiaochuan, propuso el pasado mes de marzo crear una divisa de reserva multinacional como parte de la reforma en el sistema monetario internacional, sumándose así a la petición de Rusia.
Xiaochuan apuestó por “crear una divisa de reserva internacional que no está relacionada con naciones individuales y puede permanecer estable a largo plazo”. Además, dijo que los Derechos Especiales de Giro (SDR, sus siglas en inglés) del Fondo Monetario Internacional (FMI) tienen el potencial para actuar como una divisa de reserva supranacional. Es decir, el objetivo sería crear una nueva súper divisa en sustitución del dólar, cuyo valor determina el resto de monedas.
El pasado julio dicha propuesta se convirtió en oficial. China advirtió en la reunión entre el G8 y el G5 que tuvo lugar entonces la necesidad de reformar el sistema monetario internacional para una “mayor diversificación de la moneda de referencia”, el dólar estadounidense. El gigante asiático nunca había sido tan explicito. Ahora, la ONU recoge el guante lanzado por China, Rusia y las potencias emergentes.
Curiosamente, el presidente ruso, Dmitry Medvedev, mostrado la “nueva moneda mundial” en su solapa durante la citada reunión de grandes potencias. EEUU no se ha postulado oficialmente en este debate hasta el momento.
Sin embargo, el secretario del Tesoro de EEUU, Tim Geithner, admitió el pasado marzo que EEUU estaba “muy abierto” a estudiar la propuesta monetaria elaborada por China y Rusia, y crear así una nueva divisa de referencia internacional. Aunque luego rectificó, ante el pánico que generó esta declaración en el mercado de divisas (el dólar se desplomó).

Fuente: libertaddigital