Aritxe y yo

Aritxe y yo

lunes, 26 de septiembre de 2011

CARTA DE UN MÉDICO CATALÁN

 Me despiden. A partir del día 1 de Agosto no podré atenderles más debido a los recortes presupuestarios en sanidad proyectados por el gobierno de la Generalitat. Según me han comentado en subdirección médica, el hospital de Bellvitge no tiene dinero para pagarme este verano. Ni a mí, ni a los otros 56 médicos eventuales que, como yo, serán despedidos. Inicialmente el plan es recontratarnos en septiembre u octubre, con contratos renovables de mes a mes, sin derecho a vacaciones y posiblemente con una rebaja del sueldo. Estas opciones son casi una invitación a los médicos para que abandonemos la sanidad pública. Lo mismo está pasando desde hace mucho tiempo con enfermeras, auxiliares y demás sanitarios que han visto empeorar sus condiciones de trabajo en los últimos años. Estos recortes, junto con los realizados previamente y el actual cierre de hospitales, contribuirán a aumentar las listas de espera tanto para consultas como para quirófanos y a reducir la calidad de la asistencia hasta el punto que, quien quiera tener acceso a la salud, sólo le quedará la opción de pagar un seguro privado. Además de los gastos de este seguro deberá contar con el hecho de que la aseguradora no tendrá la misma cobertura de salud que la sanidad pública. Esto será un gran beneficio económico para las aseguradoras de salud, que posiblemente ya se están frotando las manos pensando en los millones de euros que ganarán aprovechando esta penosa situación. También será un gran beneficio para las arcas de los gobiernos que habrán de gastar menos dinero en salud. Es decir, la salud de las personas es una carga para las arcas de los gobiernos. Pero entonces, ¿por qué pagamos impuestos? Resulta curioso que no haya dinero para pagar médicos pero que sí haya para pagar un parlamento europeo, otro nacional, un parlamento autonómico, diputaciones y alcaldías. (No sé si son necesarios tantos "jefes"). También hay dinero para pagar pensiones vitalicias, y de cantidades importantes, a diputados y senadores. Yo personalmente prefiero tener un cirujano y una anestesista contratados que un político en su casa felicitándose por las cosas buenas que hizo cuando estaba trabajando para levantar el país. También hay dinero para mantener coches oficiales que evidentemente son coches de gama alta y para que nuestros eurodiputados viajen en primera clase para que se cansan si viajan en clase turista. Eso sin contar dietas, alojamientos y otros gastos. Hay miles de millones de euros para rescatar a los bancos de la crisis pero sin que después se les pida que devuelvan el dinero que se les ha dejado, este préstamo es lo que nos deja sin dinero para la salud y la la educación. Pero claro, los políticos y los bancos siempre son muy amigos y la economía de libre mercado intocable. ¿No hay dinero? No me lo creo. Señores pacientes. Luchen por su salud: porque se la están robando. Con la excusa de la crisis, han retirado el dinero a lo más necesario en benificio de unos pocos. Nuestra sanidad, se está hundiendo y no es por falta de dinero sino por puros intereses económicos .. Quizás acabaremos como en Estados Unidos donde, quien no se lo puede permitir, no tiene derecho a la salud. Luchen por su salud. Hagan reclamaciones, demandas judiciales, manifiéstense, asóciense, indígnense.
 Los sanitarios ya hemos luchado, ahora les toca a ustedes. Quieren privatizar LA SANIDAD Y lo conseguirán si USTEDES NO LO IMPIDEN.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

LA SABIDURIA DE LOS ANCIANOS


Había una vez, hace mucho, mucho tiempo, una pequeña región montañosa dónde tenían la costumbre de abandonar a los ancianos al pie de un monte lejano. Creían que cuando se cumplían los sesenta años dejaban de ser útiles, por lo que no podían preocuparse más de ellos.

En una pequeña casa de un pueblecito perdido, había un campesino que acababa de cumplir los sesenta años. Durante todos estos años había cuidado la tierra, se había casado y había tenido un hijo. Después había enviudado y su hijo también se casó, dándole dos preciosos nietos. A su hijo le dio mucha pena, pero no podía desobedecer las estrictas órdenes que le había dado su señor. Así que se acercó a su padre y le dijo:

- Padre, los siento mucho, pero el señor de estas tierras nos ha ordenado que debemos llevar a la montaña todos los mayores de sesenta años.

- Tranquilo hijo, lo entiendo. Debes hacer lo que el señor diga -, contestó el anciano lleno de tristeza.

Así que el joven se cargó al viejo a la espalda, ya que a su padre ya le era difícil caminar por el bosque, e inició el viaje hacia las montañas. Mientras iban caminando, el joven se fijo que su padre dejaba caer pequeñas ramas que iba rompiendo. El joven creyó que quería marcar el camino para poder volver a casa pero cuando le preguntó, el anciano le dijo:

- No lo estoy haciendo para mi, hijo. Pero vamos a un lugar lejano y escondido, y sería un desastre que te desorientases y no pudieses volver. Así que he pensado que si iba dejando ramitas por el camino seguro que no te perderías.

Al oír estas palabras el joven se emocionó con la generosidad de su padre. Pero continuó caminando porqué no podía desobedecer al señor de esas tierras.

Cuando finalmente llegaron al pie de la montaña, el hijo, con el corazón hecho pedazos, dejó allí a su padre. Para volver decidió utilizar otra ruta, pero se hacía de noche y no conseguía encontrar el camino de vuelta. Así que retrocedió sobre sus pasos y cuando llegó junto a su padre le rogó que le indicara por dónde tenía que ir. Se volvió a cargar a su padre a la espalda y, siguiendo las indicaciones del anciano, empezó a cruzar el valle por el que habían venido.

Gracias a las ramitas rotas que el viejo había dejado por el camino, pudieron llegar a su casa. Toda la familia se puso muy contenta cuando vieron de nuevo al anciano. Entonces, el joven decidió esconderlo debajo los tablones del suelo de su cabaña para que nadie lo viese y no le obligasen a llevárselo otra vez.

El señor del país, que era bastante caprichoso, a veces pedía a sus súbditos que hiciesen cosas muy difíciles. Un día, reunió a todos los campesinos del pueblo y les dijo:

- Quiero que cada uno de vosotros me traiga una cuerda tejida con ceniza.

Todos los campesinos se quedaron muy preocupados. ¿Cómo podían tejer una cuerda con ceniza? ¡Era imposible! El joven campesino volvió a su casa y le pidió consejo a su padre, que continuaba escondido bajo los tablones.

- Mira -, le explicó el anciano-, lo que tienes que hacer es trenzar una cuerda apretando mucho los hilos. Luego debes quemarla hasta que solo queden cenizas.

El joven hizo lo que su padre le había aconsejado y llevó la cuerda de ceniza a su señor. Nadie más había conseguido cumplir con la difícil tarea. Así que el joven campesino recibió muchas felicitaciones y alabanzas de su señor.

Otro día, el señor volvió a convocar a los hombres de la aldea. Esta vez les ordenó a todos llevarle una concha atravesada por un hilo. El joven campesino se volvió a desesperar. ¡No sabía cómo se podía atravesar una concha! Así que, cuando llegó a casa, volvió a preguntar a su padre lo que debía hacer y éste le contestó:

- Coge una concha y orienta su punta hacia la luz- explicó el anciano-. Después coge un hilo y engánchale un grano de arroz. Entonces dale el grano de arroz a una hormiga y haz que camine sobre la superficie de la concha. Así conseguirás que el hilo pase de un lado al otro de la concha.

El hijo siguió las instrucciones de su padre y así pudo llevar la concha ante el señor de esas tierras. El señor se quedó muy impresionado:

- Estoy orgulloso de tener gente tan inteligente como tú en mis tierras. ¿Como es que eres tan sabio? - le preguntó el señor.

El joven decidió contestarle toda la verdad:

- Veréis señor, debo ser sincero. Yo debería haber abandonado a mi padre porqué ya era mayor, pero me dio pena y no lo hice. Las tareas que nos encomendó eran tan difíciles que solo se me ocurrió preguntar a mi padre. Él me explicó como debía hacerlo y yo os he traído los resultados.Cuando el señor escuchó toda la historia, se quedó impresionado y se dio cuenta de la sabiduría de las personas mayores.

Por eso se levantó y dijo:

- Este campesino y su padre me han demostrado el valor de las personas mayores. Debemos tenerles respeto y por eso, a partir de ahora, ningún anciano deberá ser abandonado.

Y a partir de entonces les ancianos del pueblo continuaron viviendo con sus familias aunque cumplieran sesenta años, ayudándolos con la sabiduría que habían acumulado a lo largo de toda su vida.

 Los esquimales, creo, cuando los ancianos perdian los dientes se convertian en inutiles para ablandar las pieles y los abandonaban en la montaña.

 Pero.... hay ANCIANOS Y  ANCIANOS: PINOCHET, FRANCO,PORFIRIO DÍAZ,BERLUSCONI,BUSH PADRE, BUSH HIJO,REAGAN,JUAN PABLO II,RATZINGER,MARIANO RAJOY,VICENTE FOX,LOS SACERDOTES PEDÓFILOS,MARIO VARGAS LLOSA,MARGARET TATCHER,ESPERANZA AGUIRRE,LA MADR ...E TERESA DE CALCUTA,MARTA SAHAGÚN DE FOX,CAYETANA DE ALBA,REY JUAN CARLOS, Y UN LAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARGUÍSIMO ETC. QUE DAN GANAS DE NO SÓLO DE DEJARLOS EN UNA MONTAÑA LEJANA, SINO EN Saturno.   Y NUNCA MÁS REGRESEN...!

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Carta de una Profesora de Secundaria

MUCHAS GRACIAS SEÑORA AGUIRRE
¡¡¡Por fin!!! Estoy realmente encantada con trabajar 20 horas semanales y pensé que este día no iba a llegar nunca. ¿De verdad que ya no vamos a tener que cumplir con los artículos 70 a 81 de la Orden Ministerial de 29 de junio de 1994 que establecía que los docentes trabajamos 37 horas y media? ¿Es cierto que ya no tengo que permanecer en el centro 27 períodos semanales y dedicar 10 horas y media semanales a claustros, juntas de evaluación, preparar mis clases, preparar exámenes y corregirlos? ¿Ya no hay exámenes? ¿Puedo decir chorradas durante 55 minutos a 30 menores de edad porque ya no tengo que preparar lo que les voy a contar? ¿Me ha quitado usted por fin esas horribles horas complementarias en las que yo hacía guardias de patio? ¿No sustituiré a mis compañeros cuando falten, ni atenderé a la biblioteca a razón de 5 horas semanales? ¿Ya no tendré que coordinarme con mi jefe de departamento una hora a la semana para que supervise el cumplimiento de una programación que no tendré que preparar nunca más? ¿Ya no voy a ser tutora? Entonces… ¿Ya no tendré que acudir a esas tediosas reuniones de tutores para coordinar el plan de acción tutorial con la orientadora? ¿Ya no tendré que tratar nunca más en la hora de tutoría que, afortunadamente ya no existe, de temas tan intrascendentes para nuestros alumnos como la resolución de conflictos, la autoestima, el compañerismo, el tabaquismo, la anorexia, etc.? ¿No tendré que controlar el absentismo de los alumnos de la tutoría que nunca me asignarán? ¿No tendré que detectar nunca más las carencias, los problemas y las necesidades de mis alumnos? porque, entiendo que no tendré tiempo en mi horario semanal de 20 horas de clase mondas y lirondas para coordinarme con el departamento de orientación. ¿Ya no pasaré una hora semanal haciendo llamaditas a las casas para contactar con las familias e informar de cómo evolucionan los niños? ¿Ya no voy a tener que recibir nunca más a los padres preocupados por sus retoños porque sólo voy a dar 20 horas de clase semanales? Esto, además, aumentará enormemente la productividad en la comunidad de Madrid: ¿Qué es eso de pedir permiso en el trabajo para entrevistarte con el tutor de tu hijo?
Le transmito también el agradecimiento de los profesores de ciencias de mi centro pues ya no tendrán que preparar las prácticas de laboratorio que nunca harán. Por cierto, ¿vendemos el mobiliario y el material de los laboratorios del centro a la privada para sacar unas perrillas y superar el déficit o se lo regalamos a los de la concertada que son colegas? ¿Vendemos el fondo de la biblioteca que nunca más se abrirá? Podemos sacarnos un pastizal, sería una pequeña contribución de la educación pública para la creación de esa fabulosa policía autonómica que desea usted crear, si lo suma a lo que se ha ahorrado usted dejando en su casa a 1424 FUNCIONARIOS (NO INTERINOS) de secundaria sacaría adelante la policía y un ejército privado si se le pone a su señoría, que usted lo vale. También me comunican los compañeros de lenguas extrajeras que tiene usted más razón que una santa, que había que plantarle cara al Consejo de Europa: a los españoles no se nos dicta cómo se enseñan los idiomas extranjeros ¿Qué coño es eso de que los grupos deben ser reducidos para potenciar la práctica oral? Aquí a 30 niños que es como hemos estudiado todos hace 40 años y no veas cómo pilotamos en esto de los idiomas.
Como trabajo en un pueblo, los padres me preguntan si vamos a tener agrupamientos flexibles en lengua y matemáticas para los alumnos que necesitan una atención más pormenorizada y les he comunicado que evidentemente no, que había que quitar docentes para superar el déficit y que su deber como buen madrileño es dar de comer a los de las academias, que tienen que salir de la crisis. En la escuela pública no se dan clases particulares. Por cierto, el colectivo de academias se suma al agradecimiento porque la recuperación de materias pendientes corre ahora de su cuenta.
Los alumnos de compensatoria, unos 25 niños que están bastante perdidos, me piden que, como les corresponde medio profesor de esa especialidad para atenderlos, si podíamos hacer algo para que les tocase la mitad que tiene aparato fonador, que las piernas no les valen.
El TIC no dice nada porque ya no hay. De todos modos ya no necesitamos ordenadores para entrar en Internet, eso lo vamos a hacer cuando, después de trabajar 4 horas diarias únicamente, volvamos a casa y no tengamos clases que preparar ni exámenes que corregir.
¿QUEDAMOS ENTONCES EN QUE PASO DE 37 HORAS Y MEDIA A 20 Y QUE ME VA A SUBIR EL SUELDO POR EL TRAUMA QUE ESTO ME OCASIONA?
ES USTED MI HEROÍNA SEÑORA AGUIRRE.
TRANSMITA MIS RESPETOS A LAS SEÑORAS FIGAR Y DELIBES, SIN CUYA INESTIMABLE AYUDA, ESTO NO HABRÍA SALIDO ADELANTE.
Por cierto, si admite usted sugerencias de una admiradora: aumente usted el horario a los presentadores de los telenoticias de TELEMADRID que está muy feo que trabajen 5 horas semanales y cobren lo que cobran.
UN SALUDO DE UNA DOCENTE AGRADECIDA






martes, 6 de septiembre de 2011